En el Día Mundial del Donante de Sangre, que se celebra el 14 de junio de 2024, la OMS, sus asociados y las comunidades de todo el mundo se unirán en torno al lema: 20 años celebrando la generosidad: ¡Muchas gracias, donantes de sangre! Esta es una excelente y oportuna ocasión para dar las gracias a aquellos cuyas donaciones han salvado vidas a lo largo de los años y honrar el profundo impacto de este acto de generosidad tanto en los pacientes como en los donantes. También es un momento oportuno para abordar los retos pendientes y acelerar el progreso hacia un futuro en el que la transfusión sanguínea segura sea universalmente accesible.
Los objetivos de la campaña son:
- reconocer y dar las gracias a los millones de donantes voluntarios de sangre que han contribuido a mejorar la salud y el bienestar de millones de personas en todo el mundo;
- dar a conocer los logros y desafíos de los programas nacionales de sangre y transmitir las mejores prácticas y las enseñanzas obtenidas;
- poner de relieve la necesidad permanente de que haya donaciones de sangre periódicas y no remuneradas para lograr el acceso universal a transfusiones de sangre seguras; y
- promover una cultura que fomente la donación periódica de sangre en la juventud y el público en general, y aumentar la diversidad y sostenibilidad del grupo de donantes de sangre.
Datos y cifras
- El 40 % de los 118,5 millones de donaciones de sangre extraídas en todo el mundo se recogen en los países de ingresos altos, donde vive el 16 % de la población mundial.
- En los países de ingresos bajos hasta un 54 % de las transfusiones sanguíneas se realizan a menores de 5 años, mientras que en los países de ingresos altos, el grupo de pacientes transfundidos con mayor frecuencia son los mayores de 60 años, que reciben hasta un 76 % del total de las transfusiones.
- La tasa de donación de sangre por cada 1000 personas es de 31,5 donaciones en los países de ingresos altos, 16,4 en los de ingresos medianos altos, 6,6 en los de ingresos medianos bajos y 5,0 en los de ingresos bajos.
- Entre 2008 y 2018 se ha notificado un aumento de 10,7 millones en las unidades de sangre donadas por donantes voluntarios no remunerados. En total, en 79 países este grupo de donantes aportó más del 90 % de su suministro de sangre; sin embargo, en 54 países más del 50 % del suministro de sangre procede de familiares o allegados o donantes remunerados.
- Solo 65 de los 171 países que aportaron datos fabrican productos medicinales derivados del plasma mediante el fraccionamiento del plasma recogido en el propio país. Un total de 91 países declararon importar todos los productos medicinales derivados del plasma, 16 países declararon que durante el periodo objeto de la notificación no utilizaron ninguno de estos productos y 8 países no respondieron a la pregunta.
- El volumen de plasma para el fraccionamiento por cada 1000 habitantes varió considerablemente entre los 44 países informantes, oscilando entre 0,1 y 52,6 litros, con una mediana de 5,2 litros.
“De acuerdo con los últimos datos disponibles para 34 países de la Región, en el 2020 se alcanzaron los 8,2 millones de unidades de sangre, de las cuales el 48 % provenían de donantes voluntarios”, dijo el doctor Jarbas Barbosa, Director de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Desafortunadamente, en muchos países, la demanda es mayor que la oferta, y los servicios de sangre enfrentan el reto de que haya suficiente disponibilidad y, al mismo tiempo, de garantizar su calidad y seguridad. Ante esto, Barbosa indicó que aun cuando las cifras generales de la Región muestran un aumento importante en las donaciones y en la disponibilidad y seguridad de la sangre, la tasa de donación de sangre por cada 1,000 personas en los países de ingresos medios y bajos sigue estando entre 50 y 70 por ciento por debajo de los países de ingresos más altos.
La OPS junto con el Ministerio de Salud del Perú han organizado una serie de actividades para conmemorar el Día Mundial del Donante de Sangre. Perú ha sido designado como país sede de la celebración en este 2024, cuya ceremonia oficial se realizará a través de un evento presencial.
Tras dos décadas, este hito marca una ocasión trascendental para reflexionar sobre los logros, abordar los desafíos y visualizar un futuro en el que se pueda contar con acceso universal a transfusiones de sangre seguras para pacientes y donantes.