«Turn it on (Enciéndelo): la salud sexual en el mundo digital» es el tema seleccionado para celebrar este año el Día Mundial de la Salud Sexual. La motivación para seleccionar este eslogan es transmitir un mensaje que enfatice en el concepto amplio de salud sexual, según la definición de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y en la importancia de hacer valer los derechos sexuales, ya que hay muchas violaciones y abusos de los estos en el espacio digital.
Vivimos en un mundo que no diferencia entre lo digital y lo analógico para conectarnos en nuestras relaciones, en el intercambio de ideas y en nuestros aprendizajes. El mundo digital se ha convertido en un espacio cotidiano en el que pasamos muchos momentos de nuestro día a día, donde tenemos conexiones universales que nos permiten acceder y expandir contenidos e informaciones para promocionar la salud sexual y los derechos sexuales mediante la difusión de mensajes apropiados.
Las tecnologías de la información y de la comunicación aportan a la promoción de la salud la herramienta idónea para conseguir que la comunicación en redes sociales promueva una implicación en el autocuidado de la salud. Especialmente, en grupos a los que no se llega con métodos tradicionales como son los jóvenes.
La implantación del Smarthphone en la vida cotidiana de las personas no solo ha revelado la penetración de la tecnología en la vida diaria, sino la oportunidad de aprovechar la incidencia tecnológica como herramienta potencial para educar desde la comunicación. El desarrollo de aplicaciones para móviles y tabletas ha supuesto una forma dinámica, individual e interactiva de llegar a las personas. En el caso de la promoción de la salud ha supuesto la posibilidad de desarrollar estrategias de comunicación más cercanas para los grupos poblacionales objetivo.
La principal función de internet es el intercambio rápido de información y en la actualidad se ha convertido en una herramienta de legitimación o rechazo de las tendencias culturales e informaciones publicadas. Por otro lado, influye en las formas de recibir y transmitir información y de crear relaciones entre las personas en la organización social.
La tendencia hacia la integración de las nuevas tecnologías como medios y creadores de comunicación, hábitos y cultura, ha aumentado, siendo adoptadas principalmente por la parte más joven de la población.
Por lo tanto, el ciberespacio se ha convertido en un marco no sólo referencial para la búsqueda de información, sino para la emisión de mensajes, con la absoluta certeza de su visibilidad y expansión. La sociedad de la información va de la mano con la globalización y las nuevas tecnologías debido a que ambas han generado avances complementándose unas con otras, uniendo latitudes y generando entendimiento no solo compartido, sino conocimiento que compartir.
En el aspecto referido a la salud pública, internet se ha convertido en una fuente de consulta y recomendación. Desde los foros de consulta generados por usuarios anónimos y legos en la materia, hasta el boom de sitios web especializados de consulta y de promoción de la salud. Existe un alto tráfico de datos en línea orientados a la búsqueda activa de información y consejo en materia de salud.
A priori es posible pensar que existe un alto número de apps orientadas a jóvenes y sexualidad, y eso es verdad si nos centramos en aplicaciones sobre sistemas de citas o enfoques lúdico-sexuales, pero no hay un panorama amplio de herramientas que aborden la promoción de prácticas sexuales saludables tanto entre los y las jóvenes cómo en las personas de cualquier franja de edad. Además, es muy sencillo acceder a la información, pero no significa que siempre logren discriminar entre lo certero y confiable de aquello que no lo es.
Pero aparecen retos adicionales cuando discutimos el uso de tecnología digital y del internet para propósitos sexuales, uno de ellos es la privacidad, el consenso, el consentimiento informado, la confidencialidad. El acceso a internet y el uso de aplicaciones multiplican las posibilidades, pero también provocan cuestionamientos y posibles amenazas, como el acoso sexual, el “bullying” y otras violencias sexuales.
El uso de la tecnología requiere pensar en un nuevo marco de referencia y de conceptualización de lo que son la salud y los derechos sexuales en un mundo digital y necesitamos aprender a integrar las tecnologías en la vida de las personas, en un entorno ético de derechos humanos.
El eslogan de este año busca llamar la atención a este reto, porque la expresión “TURN IT ON” (Enciéndelo) es un llamado a la acción para cuestionarnos y reflexionar de los riesgos y las oportunidades que nos ofrece el mundo digital y cómo estos maximizan o amenazan la salud y derechos sexuales.