Existe evidencia limitada sobre la asociación entre el inicio de medicación antihipertensiva y el riesgo de fracturas en residentes mayores de residencias de ancianos a largo plazo. El objetivo de este estudio publicado en JAMA Internal Medicine fue evaluar la asociación entre el inicio de medicación antihipertensiva y el riesgo de fractura.
Diseño, entorno y participantes Â
Este fue un estudio de cohorte retrospectivo que utilizó emulación de ensayo objetivo para datos derivados de 29 648 residentes mayores de hogares de ancianos con cuidados a largo plazo en la Administración de Salud de Veteranos (VA) desde el 1 de enero de 2006 hasta el 31 de octubre de 2019. Los datos se analizaron desde el 1 de diciembre de 2021 hasta el 11 de noviembre de 2023.
Se identificaron episodios de exposición al inicio de la medicación antihipertensiva y los episodios de inicio elegibles se compararon con controles comparables que no iniciaron la terapia.
Principales resultados y medidas Â
El resultado primario fue la fractura no traumática del húmero, la cadera, la pelvis, el radio o el cúbito dentro de los 30 dÃas posteriores al inicio de la medicación antihipertensiva. Los resultados se calcularon entre subgrupos de residentes con demencia, con umbrales de presión arterial sistólica y diastólica de 140 y 80 mm Hg, respectivamente, y con el uso de terapias antihipertensivas previas. Los análisis se ajustaron para más de 50 covariables iniciales utilizando el emparejamiento por puntuación de propensión 1:4.
Resultados Â
En este estudio se incluyeron datos de 29 648 personas (edad media [DE], 78,0 [8,4] años; 28.952 [97,7 %] hombres).
En la cohorte emparejada por puntuación de propensión de 64 710 residentes (edad media [DE], 77,9 [8,5] años), la tasa de incidencia de fracturas por 100 personas-año en los residentes que iniciaron medicación antihipertensiva fue de 5,4 en comparación con 2,2 en el grupo de control. Este hallazgo correspondió a un Ãndice de riesgo ajustado (HR) de 2,42 (IC del 95 %, 1,43-4,08) y un exceso de riesgo ajustado por 100 personas-año de 3,12 (IC del 95 %, 0,95-6,78).
El inicio de la medicación antihipertensiva también se asoció con un mayor riesgo de caÃdas graves que requirieron hospitalizaciones o visitas al departamento de urgencias (HR, 1,80 [IC 95 %, 1,53-2,13]) y sÃncope (HR, 1,69 [IC 95 %, 1,30-2,19]).
La magnitud del riesgo de fractura fue numéricamente mayor entre los subgrupos de residentes con demencia (HR, 3,28 [IC 95%, 1,76-6,10]), presión arterial sistólica de 140 mm Hg o superior (HR, 3,12 [IC 95 %, 1,71-5,69]). ]),  presión arterial diastólica de 80 mm Hg o más (HR, 4,41 [IC del 95%, 1,67-11,68]) y ningún uso reciente de medicamentos antihipertensivos (HR, 4,77 [IC del 95 %, 1,49-15,32]).
Conclusiones y relevancia Â
Los hallazgos indicaron que el inicio de medicación antihipertensiva se asoció con riesgos elevados de fracturas y caÃdas. Estos riesgos fueron numéricamente mayores entre los residentes con demencia, valores iniciales de presión arterial más altos y sin uso reciente de medicamentos antihipertensivos. Se recomienda precaución y vigilancia adicional al iniciar la medicación antihipertensiva en esta población vulnerable.
Vea el análisis del artÃculo en: Tratamiento antihipertensivo y riesgo de fracturas y caÃdas. Intramed – 23 abril 2024 (debe registrarse en el sitio web).