«Oportunidades perdidas» para el diagnóstico de mujeres con vaginitis

Responsable: Patricia Alonso Galbán

Dpto. Servicios Especiales de Información

Las mujeres a las que se les realiza un examen de vaginitis mediante una prueba de amplificación nucleica tienen significativamente más probabilidades de ser sometidas a pruebas conjuntas de Chlamydia trachomatis y Neissaria gonorrhoeae que las mujeres diagnosticadas con otros tipos de pruebas, según datos de más de 1,3 millones de personas.

Aunque el estándar de atención para diagnosticar la vaginitis es la evaluación clínica, muchas prácticas no realizan una evaluación clínica precisa y completa por diversas razones, y los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades (CDC) actualmente recomiendan pruebas moleculares, escribieron Casey N. Pinto, Ph. D., de la Penn State University, en Hershey, Estados Unidos, y sus colaboradores. Los CDC también recomiendan realizar pruebas a las mujeres con vaginitis para detectar Chlamydia trachomatis y Neissaria gonorrhoeae, dada la alta tasa de coinfecciones entre vaginitis y estas infecciones de transmisión sexual, pero los datos sobre las pruebas conjuntas en la práctica clínica son limitados, dijeron.

En un estudio publicado en Sexually Transmitted Diseases, los investigadores revisaron una base de datos de reclamaciones administrativas comerciales de 1.359.289 mujeres de 18 a 50 años a las que se les diagnosticó vaginitis entre 2012 y 2017.

Las mujeres fueron categorizadas en grupos según el tipo de diagnóstico de vaginitis: prueba de amplificación nucleica, prueba de sonda de ácido desoxirribonucleico (ADN), prueba de laboratorio tradicional y aquellas diagnosticadas clínicamente en una visita inicial, pero sin código de terminología procedimental actual (CPT) para pruebas adicionales.

En general, casi la mitad de las mujeres (49,2%) no tenía ningún código terminología procedimental actual para seguir con más pruebas de vaginitis más allá del diagnóstico clínico. De aquellas con códigos, 50,9% se sometió a pruebas tradicionales en el lugar de atención: preparación húmeda o cultivo, 23,5% tuvo una prueba por sonda de ADN y 20,6% se sometió a una prueba de amplificación nucleica.

Aproximadamente un tercio (34%) de las mujeres se sometió a pruebas conjuntas de Chlamydia trachomatis/Neissaria gonorrhoeae. Las tasas de pruebas variaron ampliamente según el tipo de prueba de vaginitis, desde el 70,8% de las mujeres que recibieron prueba de amplificación nucleica hasta el 22,8% sin código de terminología procedimental actual. En un análisis multivariado que incluyó la edad, la región y el índice de comorbilidad de Charlson, las que se sometieron a la prueba de amplificación nucleica tuvieron ocho veces más probabilidades de someterse a la prueba conjunta de Chlamydia trachomatis/Neissaria gonorrhoeae que aquellas sin código terminología procedimental actual (odds ratio: 8,77; p < 0,0001).

Vea la noticia completa en Medscape (debe estar registrado en el sitio).

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

  • Categorías de anuncio

    open all | close all
  • Categorías de aviso

  • Categorías de editoriales

  • Categorías de entrevista

  • Categorías de informes y sello

    open all | close all
  • Categorías sello – entidades

    open all | close all
  • Categorías de Noticia

    open all | close all
  • Secciones de noticias

    open all | close all
  • Archivo Anuncios

  • Archivo Avisos

    • Archivo Editoriales

      • Archivo Entrevistas

        • Archivo Informe y sello

        • Archivo Nota Oficial

          • Archivo Noticias

          • Archivo Obituarios

            • Actualidad

            • Salud es el Tema