El 28 de enero de 1853 nació José Julián Martí Pérez, en la calle Paula, en La Habana, Cuba. Fue un poeta y político cubano, ensayista, periodista y filósofo, fundador del Partido Revolucionario Cubano y organizador de la guerra de Independencia de Cuba. Se le ha considerado el iniciador del modernismo literario en Hispanoamérica.
Martí fue un fiel seguidor de las ideas emancipadoras de “El Libertador”, Simón Bolívar, amante de la libertad del hombre, de la tierra en la que nace, de los sueños de independencia y de una América unida, nuestra, que debía andar “en cuadro apretado”.
Su obra significa necesariamente comprender que fue un hombre que, en 42 años de vida, desarrolló un vasto pensamiento político en condiciones adversas.
Nuesro Héroe Nacional desarrolló una obra revolucionaria con el objetivo de “impedir a tiempo con la independencia de Cuba que se extiendan por las Antillas los Estados Unidos y caigan, con esa fuerza más, sobre nuestras tierras de América”.
La obra del apóstol José Martí es muy grande y bella, él escribió para todos los tiempos y para todos, escribió para los niños, para los jóvenes, las mujeres, los ancianos, para Cuba, para América, para todo el mundo. Martí escribió sobre salud y medicina, también describió lo que era un enfermero.
La Biblioteca Virtual en Salud (BVS-Cuba) le propone revisar La actividad científica en Cuba desde el ideal transformador martiano. Este artículo pretende lograr un acercamiento al ideario humanista martiano y su reflejo en la actividad que desarrollan miles de científicos en Cuba, sobre todo en momentos aún presentes de la COVID-19; de tal modo que los resultados que puedan obtenerse de la labor que ellos despliegan sean un reflejo de esa aspiración y trasciendan la simple solución de una necesidad material, de uso o de vida; además que, al ver la luz, originen un tributo ético de formación de la conciencia y de convicciones que se arraiguen en un contexto que ampara y enaltece. En esencia, se realiza el tratamiento de dos dimensiones presentes en su obra, la originalidad y la verdad como consecuencia del concepto trabajo, en cuya base se manifiestan un grupo de valores éticos de gran alcance para esa actividad.
Agradezco las propuesta, es un excelente artículo, felicito muy sinceramente al autor Evelio.