La Organización Mundial de la Salud ha acogido hoy con satisfacción el compromiso histórico manifestado por los líderes mundiales ante la Asamblea General de las Naciones Unidas de reforzar la cooperación, la coordinación, la gobernanza y la inversión internacionales necesarias para evitar que se repitan las devastadoras repercusiones sanitarias y socioeconómicas causadas por la COVID-19, lograr que el mundo esté mejor preparado frente a futuras pandemias y retomar el camino hacia la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
«La primera cumbre de Jefes de Estado sobre prevención, preparación y respuesta frente a pandemias es un hito histórico en el empeño urgente por lograr que todas las personas del mundo estén más seguras y mejor protegidas frente a los efectos devastadores de las pandemias,» ha dicho el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS. «Acojo con satisfacción este compromiso de los líderes mundiales de proporcionar el apoyo político y la orientación necesarios para que la OMS, los gobiernos y todas las partes implicadas puedan proteger la salud de las personas y tomen medidas concretas para invertir en las capacidades locales, garantizar la equidad y apoyar la arquitectura sanitaria mundial para emergencias que el mundo necesita.»
La declaración política, aprobada por el Sr. Dennis Francis, Presidente del septuagésimo octavo periodo de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, y resultado de las negociaciones llevadas a cabo bajo la hábil dirección de los Embajadores Gilad Erdan, de Israel, y Omar Hilale, de Marruecos, subrayaron el papel fundamental que desempeña la OMS como «autoridad directiva y coordinadora en asuntos de sanidad internacional» y la necesidad de «comprometerse aún más con una financiación sostenible que proporcione a la Organización Mundial de la Salud una financiación adecuada y previsible con la que disponer de los recursos necesarios para cumplir sus funciones básicas.»
«La experiencia vivida por las personas que sufrieron la pandemia de la COVID-19 debe estar en el foco de nuestras mentes de cara al futuro para hacer realidad la clara orientación proporcionada por los líderes mundiales,» afirmó el Dr. Tedros. «Debemos aprender a proteger mejor a nuestras comunidades y a implicarlas, informarlas y empoderarlas para que formen parte de la solución. Tenemos que construir sistemas de atención clínica más sólidos que puedan salvar vidas. Para ello se requieren acciones concretas que garanticen un acceso equitativo a las contramedidas médicas, una financiación sostenible y adecuada, unas comunidades empoderadas y comprometidas y unos trabajadores de la salud competentes, capacitados y equipados.»
«Los devastadores efectos de la COVID-19 demostraron por qué el mundo necesita un enfoque más colaborativo, cohesivo y equitativo para prevenir, prepararse y responder ante pandemias,» afirmó el Dr. Tedros.
El Dr. Tedros señaló que los gobiernos y los asociados multilaterales ya han empezado a sentar las bases de un mundo más seguro con la creación del Fondo contra Pandemias, el Centro de Información de la OMS sobre Pandemias y Epidemias, el BioHub de la OMS para compartir voluntariamente nuevos materiales biológicos y el centro de transferencia de tecnología para las vacunas de ARNm.
Sin embargo, el Dr. Tedros añadió que en la declaración política aprobada el miércoles se pedía un mayor refuerzo de la arquitectura mundial para emergencias sanitarias con miras a proteger mejor al mundo frente a una reaparición de la COVID-19.
Entre las numerosas medidas requeridas, en la declaración política se reconocía la necesidad de que los Estados Miembros tuvieran a bien:
- Concluir las negociaciones sobre un convenio, acuerdo u otro instrumento internacional de la OMS sobre prevención, preparación y respuesta frente a pandemias, también conocido como Acuerdo sobre Pandemias, y proseguir su labor para introducir modificaciones específicas en el Reglamento Sanitario Internacional (2005) para mayo de 2024.
- En consonancia con el proceso del Acuerdo sobre Pandemias, garantizar el acceso sostenible, asequible, justo, equitativo, eficaz, eficiente y oportuno a las contramedidas médicas, incluidas las vacunas, las pruebas diagnósticas, los tratamientos y otros productos de salud.
- Adoptar medidas para contrarrestar y abordar los efectos negativos en la salud física y mental de las personas de la información errónea, la desinformación, los discursos de odio y la estigmatización en relación con la salud, especialmente en las plataformas de las redes sociales, incluida la lucha contra la reticencia a vacunarse en el contexto de la prevención, preparación y respuesta ante pandemias, y fomentar la confianza en los sistemas y las autoridades de salud pública, entre otras cosas aumentando la educación, la adquisición de conocimientos y la sensibilización en materia de salud pública, reconociendo al mismo tiempo que la participación efectiva de las partes interesadas requiere el acceso a información oportuna, precisa y basada en pruebas, así como la sensibilización, en particular mediante el uso de herramientas de salud digital.
- Proteger a nuestras comunidades invirtiendo en la atención primaria de salud y otras medidas relativas al sistema de salud, como parte de un compromiso con la cobertura sanitaria universal, con el fin de garantizar la existencia de sistemas de salud nacionales sólidos para responder a futuras pandemias.
- Invertir para garantizar que la OMS se refuerce al nivel necesario para desempeñar su papel en la respuesta a las amenazas pandémicas. La financiación sostenible de la OMS y de los sistemas nacionales de salud es esencial para lograr que el mundo sea más seguro.
- Reforzar el personal de salud y las capacidades de respuesta rápida, los sistemas de vigilancia y suministro, y las capacidades de fabricación local para empoderar a todos los países y permitir que tengan la capacidad de satisfacer sus propias necesidades de prevención, preparación y respuesta frente a pandemias.
- Aumentar la capacidad de los sistemas de salud para hacer frente a las amenazas pandémicas en los países de ingreso bajo y mediano bajo, especialmente en África.
- Contrarrestar y abordar los efectos negativos en la salud física y mental de las personas de la información errónea, la desinformación, los discursos de odio y la estigmatización en relación con la salud, especialmente en las plataformas de las redes sociales, con el fin de fortalecer la prevención, preparación y respuesta ante pandemias, y fomentar la confianza en los sistemas y las autoridades de salud pública.
- Aprovechar el potencial del sistema multilateral y ampliar el enfoque multisectorial necesario para mejorar la prevención, preparación y respuesta ante pandemias, debido a las muy diversas causas y consecuencias de las pandemias, en apoyo de la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Tras la aprobación en el día de hoy de la declaración política por el Presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, los líderes de los Estados Miembros de las Naciones Unidas hicieron declaraciones sobre la importancia crítica de la prevención, preparación y respuesta ante pandemias y la necesidad de una arquitectura mundial para emergencias sanitarias sólida, coordinada y de gran alcance.