África tiene un total de 54 países reconocidos. Este número puede variar en función de las diferentes fuentes y criterios de reconocimiento internacional, pero en general, la cifra aceptada es 54.
La salud en África ha experimentado cambios significativos en las últimas décadas, con mejoras notables en algunos indicadores, aunque persisten desafíos importantes. En 1990, la esperanza de vida en África sub-Sahariana era de aproximadamente 47 años. Gracias a avances en la atención médica y mejoras en las condiciones de vida, esta cifra ha aumentado a alrededor de 60 años para 2020.
No obstante, existen disparidades notables entre países; mientras que Egipto y Sudáfrica presentan una esperanza de vida superior a los 65 años, países como Chad y Nigeria aún enfrentan cifras inferiores a los 60 años.
La tasa de mortalidad infantil también ha visto una disminución significativa. En 1990, esta tasa era de 106 muertes por cada 1 000 nacidos vivos. Para 2020, se había reducido a cerca de 70 muertes por cada 1 000 nacidos vivos, reflejando mejoras en la atención prenatal y neonatal.
Sin embargo, la mortalidad infantil sigue siendo alta en comparación con otras regiones del mundo. La mortalidad materna ha sido otro foco de atención. En 1990, la tasa de mortalidad materna era de aproximadamente 1 100 muertes por 100 000 nacidos vivos.
Gracias a los esfuerzos en salud pública, esta tasa se redujo a alrededor de 500 muertes por 100 000 nacidos vivos en 2020. A pesar de estos avances, la mortalidad materna sigue siendo preocupantemente alta en comparación con otras regiones.
Las enfermedades infecciosas como el VIH/SIDA y la malaria continúan siendo desafíos importantes. Aunque las tasas de nuevas infecciones por VIH han disminuido, la malaria sigue afectando a muchas áreas. Además, las enfermedades no transmisibles como las enfermedades cardiovasculares, diabetes y cáncer están en aumento, impulsadas por cambios en los estilos de vida y la dieta.
El acceso a servicios de salud varía significativamente entre países y regiones. Algunos países han avanzado hacia la cobertura universal de salud, mientras que otros enfrentan desafíos persistentes debido a la falta de infraestructura adecuada y profesionales de salud. Las mejoras en la capacitación y los recursos son fundamentales para enfrentar estas brechas.
La desnutrición infantil sigue siendo un problema, aunque las tasas han disminuido gracias a programas de alimentación y desarrollo infantil. Paralelamente, la obesidad está en aumento en áreas urbanas debido a cambios en la dieta y el estilo de vida.
Se han logrado avances en áreas clave de salud pública, como la vacunación. Las tasas de vacunación han mejorado, reduciendo la incidencia de enfermedades prevenibles como el sarampión y la poliomielitis. Además, el acceso a agua potable y saneamiento ha mejorado, contribuyendo a la reducción de enfermedades transmitidas por el agua.
África ha logrado avances significativos en la salud general en las últimas décadas, con mejoras en la esperanza de vida, reducción de la mortalidad infantil y materna, y progresos en vacunación y saneamiento. No obstante, persisten desafíos importantes que requieren atención continua para seguir mejorando la salud en el continente.
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Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas. Biblioteca Médica Nacional. Salud en África. Factográfico Salud [Internet]. 2024 Sept [citado Día Mes Año];10(9): [aprox. 21 p.]. Disponible en: Factografico-sept-2024.-Salud-en-Africa.pdf (sld.cu)