Los nuevos hallazgos sobre la posibilidad de que la estimulación cerebral potencie la memoria, mejore los sÃntomas del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y trate la depresión dieron lugar al principal tema de la Tendencia clÃnica en la red médica Medscape. Un nuevo estudio realizado en 150 adultos de 65 a 88 años mostró que la estimulación transcraneal con corriente alterna (tACS) durante 20 minutos en 4 dÃas consecutivos tenÃa un efecto duradero en la memoria.
La mayorÃa de los pacientes que participaron en el estudio tenÃan una pérdida de memoria tÃpica o un trastorno cognitivo leve. Se administraron corrientes eléctricas a través de electrodos integrados en un casco.
La focalización en la corteza parietal inferior a una frecuencia baja de 4 Hz mejoró selectivamente la memoria de trabajo (a corto plazo) sin afectar a la memoria a largo plazo. Por otra parte, la focalización en la corteza prefrontal dorsolateral a 60 Hz mejoró selectivamente la memoria a largo plazo sin afectar a la memoria a corto plazo.
La tasa de mejora de la memoria durante la intervención de 4 dÃas predijo la magnitud del beneficio sobre la memoria en el punto temporal de 1 mes. Los participantes que tenÃan una función cognitiva inicial más baja demostraron mejoras mayores y más duraderas en la memoria.
En vez de la estimulación transcraneal con corriente alterna, otra investigación descubrió recientemente que la estimulación transcraneal con corriente directa (estimulación transcraneal con corriente directa) mejoraba la atención de los pacientes con trastorno por déficit de atención con hiperactividad que no tomaban estimulantes.
En el estudio, se aleatorizó a 64 adultos para que recibieran estimulación activa o simulada. Todos los participantes tenÃan sÃntomas moderados o graves de inatención, con una puntuación de inatención de 21 o superior en la Escala de autoinforme de trastorno por déficit de atención con hiperactividad para adultos versión 1.1 (CASRS), administrada por el profesional clÃnico.
Aproximadamente un tercio de los pacientes (34,3%) del grupo asignado a estimulación transcraneal con corriente directa activa logró una reducción de 30% en la puntuación de la CASRS-I, en comparación con 6,2% del grupo asignado a estimulación transcraneal con corriente directa simulada.
La estimulación cerebral no invasiva también puede ser beneficiosa en el tratamiento de la anosmia o la hiposmia crónicas relacionadas con la COVID-19. Alrededor de 1% de los pacientes con COVID-19 experimentan una pérdida de olfato a largo plazo, lo que representa un número considerable, dada la extensión global.
Los resultados de un pequeño estudio doble enmascarado y controlado con intervención simulada mostraron que la estimulación transcraneal con corriente directa anodal (A-tDCS) combinada con entrenamiento olfativo proporcionó una mejora notable y duradera en siete pacientes con hiposmia o anosmia persistente relacionada con la COVID-19.
Vea el texto completo en: Estimulación cerebral – Medscape – 2 septiembre 2022 (debe registrarse en el sitio web)