Cuba: logros en salud

Experiencia de oftalmóloga villaclareña impacta en congreso estadounidense

El trabajo realizado por la Dra. Zoila Fariñas Falcón permite la detección precoz de la retinopatía de la prematuridad, en niños con extremado bajo peso al nacer y pocas semanas de edad gestacional.

La Dra. Zoila Fariñas Falcón, oftalmóloga del Hospital clínico quirúrgico universitario «Arnaldo Milián Castro», de Villa Clara, acaba de regresar de un congreso en los Estados Unidos, donde presentó la experiencia villaclareña en la detección precoz de la retinopatía de la prematuridad (ROP) que, por primera vez, es aplicada en Cuba.

Se trató de la V cita mundial de Pediatría, efectuada en Las Vegas, a la que asistieron representantes de Qatar, Italia, México, Brasil, Estados Unidos y Portugal, entre otras naciones.

El trabajo realizado por Fariñas Falcón impactó, sobremanera, ante el tratamiento precoz que reciben los niños con extremado bajo peso al nacer y pocas semanas de edad gestacional, lo que provoca una prematuridad severa que, de no tratarse de inmediato, abre las puertas a una ROP agresiva.

Esta modalidad está ausente en el mundo como parte del Programa Materno-Infantil (PAMI) e incorpora la totalidad de especialidades necesarias para el logro de la atención integral. Al no existir en esos países las tasas de mortalidad resultan elevadas.

Hace dos décadas la Dra. Fariñas Falcón encabeza el programa de ROP en el territorio que, hasta el pasado año, había pesquisado a más de 1 000 infantes prematuros, de los que se han tratado 45, lo que impide que la provincia reciba a niños ciegos.

«En ello interviene un equipo multidisciplinario que incluye a Salud, el Mined (Ministerio de Educación), y trabajo social a fin de insertar a los pequeños con discapacidades físicas, oftalmológicas y neurosicológicas a la sociedad, ofrecer una atención integral y determinar la conducta a seguir».

Se ha establecido una alianza estrecha con los especialistas en neonatología y figura como uno de los mejores programas del PAMI, a pesar de estar marcado por limitaciones de recursos e insumos, pero sin detenerse ni en la etapa aguda de la pandemia.

En ello juega un papel determinante la familia para el seguimiento de los menores y la aplicación de las conductas necesarias.

De acuerdo con las investigaciones estos casos no solo han manifestado afecciones oftalmológicas ya que algunos reportan epilepsias, dificultades respiratorias y autismo, por citar algunas.

«Es la primera vez que en Cuba se realiza esta experiencia e, internacionalmente, no existe un modelo integral para el abordaje de la ROP que, en nuestro medio, incorpora todos los niveles de atención de Salud, según las necesidades de cada paciente, y no solo presenta novedad científica y tecnológica, si no también económica al superar los 14000 pesos por consultas, procedimientos operatorios y tratamientos de rehabilitación».

Dos nuevos premios se suman al currículo de la Dra. Zoila Fariñas: el Premio Academia de Ciencias 2024 y el de Innovación Tecnológica, ambos conferidos por el Citma, a partir de su trabajo para optar por el título de Dr. en Ciencias sobre la temática presentada en el evento foráneo.

 

Más ciencia en Cuba en función de la vida

Más de cuatro décadas atrás inició en Cuba el desarrollo de la Tecnología suma (Sistema Ultramicroanalítico), convertida en punto de partida para la implementación y el fortalecimiento de importantes estrategias, tecnologías y productos que respaldan el pesquisaje activo, integral y sostenible en Salud. Sus resultados hoy son fruto, en primer lugar, de los sueños y las ideas de Fidel para impulsar el desarrollo científico en el país.

Sobre el impacto del uso de esa tecnología en numerosos programas del Sistema Nacional de Salud, así como las proyecciones que para continuar avanzando en las investigaciones asociadas a ellos se han propuesto en el Centro de Inmunoensayo (CIE), institución «madre» de esa tecnología en el país, se intercambió en la tarde de este lunes durante un nuevo encuentro del Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, con expertos y científicos en temas de Salud.

Ese sistema, al ser un resultado completamente cubano, dotó a la Mayor de las Antillas, desde el año 1982, de soberanía tecnológica para garantizar la detección temprana de padecimientos que afectan a la población cubana, y en muchas ocasiones pueden ser prevenidos y tratados oportunamente.

Contar con este tipo de tecnología, explicó el máster en Ciencias Aramís Sánchez Gutiérrez, vicedirector general del cie, perteneciente al Grupo Empresarial BioCubaFarma, ha permitido a nuestra nación ser el segundo país en el mundo con un Programa Nacional de Alfafetoproteína; el segundo en la región de las Américas con un Programa Nacional de Hipotiroidismo Congénito, y el primero del mundo en eliminar la transmisión vertical del VIH/Sida.

En tal sentido, comentó acerca de los beneficios que representa el SUMA en programas como el de Atención Materno Infantil y el de certificación de sangre (placenta, órganos y hemoderivados); en la vigilancia epidemiológica; en el control de diferentes localizaciones de cáncer como los de próstata y cérvix, así como otros de vital importancia para la atención médica en Cuba.

La amplia red de laboratorios que se ha fomentado en el territorio nacional, que en la actualidad cuenta con 2 116 servicios, es la encargada de llevar a cabo esos diagnósticos, detalló el investigador durante el encuentro, que fue conducido por el ministro de Salud Pública, doctor José Angel Portal Miranda.

De manera particular, los estudios que desde 1982 se realizan como parte del Programa Alfafetoproteína, refirió, han permitido el estudio de más de cinco millones de gestantes y así detectar a tiempo malformaciones incompatibles con la vida, lo cual ha tenido un impacto significativo en la reducción de la mortalidad infantil.

Otro de esos programas que ha sido posible desarrollar, es el asociado al diagnóstico precoz del hipotiroidismo congénito, a los infantes cubanos nacidos a partir de 1986.

De los beneficios de la Tecnología suma para la detección de la fibrosis quística, habló esta tarde de lunes la doctora en Ciencias Gladys Abreu Suárez, en representación de la Comisión Nacional de fibrosis quística. Esa enfermedad, detalló, aun cuando es crónica y hereditaria, tiene síntomas que pueden ir apareciendo, tanto en los primeros meses de vida como más adelante, y «mientras más temprano se haga el diagnóstico, realmente mejor es la supervivencia y el pronóstico de los pacientes, al ser este un padecimiento que afecta su estado nutricional, la función pulmonar, la calidad de vida y, a la larga, la sobrevida».

Antes de la pesquisa que nos ha permitido realizar la Tecnología suma, aseguró, «teníamos un diagnóstico del 70 % de los pacientes en los primeros cinco años de vida, pero de ellos un 20 % en el primer año y un 50 % entre uno y cuatro años de edad. En estos momentos, desde que iniciamos en el año 2019 el uso del SUMA para el pesquisaje, tenemos un 70 % de diagnóstico en el primer año de vida».

De acuerdo con la explicación de la Doctora, si bien todavía no se pueden mostrar muchos resultados, pues es una enfermedad poco común en nuestro país, aunque sí muy letal, el diagnóstico temprano que se está haciendo «ha permitido trabajar más con la familia en la educación nutricional, en la fisioterapia respiratoria, y en toda una serie de acciones para evitar el daño, sobre todo pulmonar progresivo, que se produce en estos pacientes».

Esos importantes logros de las investigaciones del Centro de Inmunoensayo, asociadas al desarrollo de esta tecnología, han posibilitado poner a disposición del Sistema Nacional de Salud a través de los años, de más de 30 kits de diagnóstico Umelisa y Umtest, para la detección y seguimiento de diversas enfermedades, entre ellas hepatitis b y c, dengue, chagas y lepra, y una amplia lista de reactivos con destino a los laboratorios de diagnóstico clínico.

En el transcurso de su intervención, el vicedirector general del cie hizo referencia, además, al desarrollo que se llevó a cabo en el país durante la pandemia de la covid-19 para la detección del virus, y que también tuvo impacto en la obtención de las vacunas y los candidatos vacunales cubanos.

Como parte de las actuales líneas de investigación, resaltó el desarrollo de varios equipos y dispositivos médicos como glucómetros y lactómetros, así como la plataforma de pruebas rápidas para la detección de dengue y de oropouche.

Al respecto, la doctora en Ciencias María Guadalupe Guzmán Tirado, directora del centro de Investigación y Diagnóstico del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK), significó que es «muy amplio el uso de esa tecnología y es un programa que consideramos exitoso en cada una de sus líneas».

El trabajo conjunto que se ha desarrollado entre el cie, el IPK y el Ministerio de Salud Pública, nos ha posibilitado una soberanía tecnológica en el diagnóstico de múltiples enfermedades, y así avanzar en su tratamiento. «Aun cuando todas las enfermedades son diferentes, una vez que uno tiene la plataforma, es difícil, pero ya no tanto», valoró, para luego destacar la importancia que tendría para el Sistema Nacional de Salud y la vigilancia epidemiológica, la concreción de la tira rápida de diagnóstico que se está desarrollando en el cie para el diagnóstico de dengue y de oropouche.

Destacan valores de la medicina cubana en Congreso Internacional de Egresados de la ELAM

«El sistema de salud cubano, único y gratuito apuesta por la solidaridad, la cobertura médica universal, y la calidad humana de sus profesionales», expresó el doctor José Ángel Portal Miranda, ministro de Salud Pública, en conferencia magistral efectuada en el I Congreso Internacional de Egresados de la Escuela Latinoamericana de Medicina. 

Explicó a los presentes los tres niveles de la sanidad en Cuba que tiene como base la atención primaria, donde se implementan los principales programas sanitarios, los cuales elevan la calidad de vida de la población.

Resaltó la integración de las 13 universidades de ciencias médicas, 29 facultades y 11 filiales en el país, encargadas de la formación de galenos, junto a la Escuela Nacional de Salud y los centros de investigación para la superación profesional y la realización de 69 especialidades médicas.

El titular del sector destacó la prevención y el control de enfermedades trasmisibles y no trasmisibles y el desarrollo de la ciencia y la técnica como pilares fundamentales del sistema de salud en la isla caribeña.

Mencionó que en la actualidad integran la red médica 451 policlínicos, 11 315 consultorios a nivel comunitario, 1 229 servicios estomatológicos, 149 hospitales, además de hogares maternos, casas de abuelos, hogares de ancianos, centros psicopedagógicos, institutos de investigación y su labor llega a las zonas más rurales de la geografía nacional.

«El sistema de salud dispone de más de 400 000 trabajadores, una cifra superior a 80 000 médicos, realidad que permite contar con ocho doctores por cada mil habitantes», añadió.

Portal Miranda exaltó la labor de Cuba en la misión médica internacional mediante el Programa Integral de Salud, Barrio Adentro, Operación Milagro, Brigadas Henry Reeve, ejemplos del compromiso de la nación con la salud en otros pueblos, con la participación de más de 600 000 colaboradores en más de 160 países, afrontando catástrofes naturales y epidemias como el ébola y la covid-19.

Abordó avances en la investigación con la ejecución de 2 767 proyectos y 82 ensayos clínicos y el desarrollo de la industria biofarmacéutica para elevar los indicadores de salud, además del programa nacional de vacunación con la aplicación de 22 inmunógenos, 11 de ellos de producción nacional.

La entrega, el amor y el compromiso de los profesores, estudiantes y graduados de la Escuela Latinoamericana de Medicina en la jornada por su aniversario 25 fue agasajada por el ministro cubano.

Refirió que el aporte de esta institución es imprescindible en la unidad e integración de los pueblos.

Sobre la importancia de la ELAM, destacó que se mantiene hoy como un baluarte de la unidad y cooperación internacional impulsada por Cuba, donde prima la docencia médica de calidad gracias a sus más de 200 profesores, rasgo avalado por la máxima calificación concedida por la Unión Universitaria de América Latina y el Caribe.

«De la ELAM emergieron y continuarán graduándose galenos que salvarán a la humanidad de tanta barbarie. Médicos y no bombas, como afirmara el líder de la Revolución, Fidel Castro», dijo Portal.

El I Congreso Internacional de Egresados de la ELAM se desarrolla en el Palacio de las Convenciones de La Habana y es una oportunidad para abordar temáticas como la atención primaria de salud, emergencias, desastres naturales y la pedagogía en la Educación Médica Superior.

De acuerdo con el programa del evento, la cita que concluye el día 15 acoge la II Asamblea Internacional de Egresados (SMI-ELAM) y servirá de espacio también para discutir sobre la formación del posgrado, retos y experiencias de las ciencias médicas.

Ver más información:

Portal Miranda: el aporte invaluable de la ELAM a la unidad e integración de los pueblos

Sancti Spíritus: municipio cubano representado en VII Encuentro de Alcaldes y Alcaldesas por Municipios Saludables de las Américas

El VII Encuentro de Alcaldes y Alcaldesas por Municipios Saludables en las Américas, organizado por la OPS, se celebró los pasados días 24 y 25 de octubre en Cusco, Perú, y contó con más de 250 participantes de 18 países de la región.

El evento ayudó a reforzar la estructura institucional del Movimiento de Municipios, Ciudades y Comunidades Saludables (MCCS), pues se acordó la creación de la primera comisión temática del Movimiento, que tratará sobre Alcaldesas por Municipios Saludables, y también se propuso la formación de una mesa de enlace subregional de Centroamérica para tocar temas específicos de esta área geográfica.

Entre las actividades desarrolladas como parte de esas jornadas, estuvo la primera reunión presencial (y novena del año) de los actuales miembros del Comité Ejecutivo del Movimiento de MCCS, integrado por Germán Ricardo Camacho Barrera, alcalde de Paipa (Colombia) y presidente del Comité; Carmen Medel Palma, alcaldesa de Minatitlán (México) y vicepresidenta primera; Bárbara de los Milagros Mínguez Amézaga, alcaldesa de Sancti Spíritus (Cuba) y vicepresidenta segunda; y Nice Simon, alcaldesa de Tabarre (Haití) y vicepresidencia tercera.

En la cita, además de participar en la reunión del Comité Ejecutivo, Mínguez Amézaga tuvo la oportunidad de compartir la experiencia de su municipio en materia de promoción de salud y participación comunitaria e intersectorial en favor del bienestar de las personas; aspectos que avalan la reciente incorporación de ese territorio al Movimiento de MCCS.

El pasado 17 de septiembre en el municipio espirituano fueron declarados nuevos espacios saludables, entre los que se encuentran escuelas primarias, universidades, un organopónico, un combinado deportivo y varios centros de trabajo. Ello se hizo público en una actividad donde participaron autoridades locales, representantes de diferentes sectores y personas de la comunidad de todas las edades.

EL CAMINO RECORRIDO EN SANCTI SPÍRITUS

La intención de que el municipio pasara a formar parte de este Movimiento surgió con el anterior mandato del gobierno municipal. Es decir, la idea comenzó a impulsarse con el anterior presidente de la Asamblea del Municipio Sancti Spíritus, Alexis LLorente Jiménez, quien actualmente es el gobernador de la provincia con el mismo nombre.

En aquel momento él tuvo la posibilidad de participar en el VI Encuentro de Alcaldes y Alcaldesas por Municipios Saludables de la Región, que se hizo en Chile, y Mínguez Amézaga, desde la posición de vicepresidenta, cargo que ocupaba entonces, contribuyó con la confección de la presentación, que hizo referencia, sobre todo, a lo logrado en materia de salud desde las esferas de educación, cultura y deporte. Asimismo, se mencionaron las potencialidades que tenía el municipio para seguir fortaleciendo el bienestar de sus comunidades.

Luego de aquella reunión, Llorente Jiménez compartió todo lo que había conocido en el evento a partir de las experiencias de los otros países, e insistió en que debían trabajar sostenidamente para lograr un municipio cada vez más saludable. De tal forma, el actual mandato del gobierno local, desde sus comienzos, asumió ese desafío con mucho compromiso.

Según palabras de Mínguez Amézaga, los gobiernos deben trabajar en favor del bienestar de la población y entre las principales necesidades por las que deben velar está la salud, a partir de una labor intersectorial y de participación comunitaria. «Yo creo que ahí están las principales herramientas. A la par del funcionamiento de los centros sanitarios, hay que fortalecer la intersectorialidad para tratar de llegar a todas las personas» -afirma.

«En Cuba, -continúa diciendo- el propio mecanismo de organización del gobierno permite entrelazar todos los sectores, lo que llamamos gobernanza local, y tenemos la posibilidad de aglutinar esfuerzos en beneficio de la salud. El gobierno lo que tiene que hacer es unir fuerzas y liderar el proceso».

Bajo ese enfoque de trabajo, el municipio ya ostenta múltiples resultados que tributan al Movimiento de MCCS. En una primera etapa, los actores locales se capacitaron y se trazaron planes de acción a partir de un análisis de la situación en salud. Luego se fueron ejecutando las iniciativas, que se iban revisando y perfeccionando constantemente. Uno de los principales retos fue conformar los consejos de salud, pero ya se ha ido avanzando en eso.

Por otro lado, una de las fortalezas fundamentales ha radicado en el trabajo mancomunado con el sector de educación, que tiene programas de salud que se aplican en las escuelas en correspondencia con una concepción integral del proceso educativo. Y algo parecido ha sucedido con la labor en ámbito de la cultura. Hoy día, las actividades culturales del municipio incluyen acciones por la salud a las que se unen muchos actores locales, incluidos los trabajadores sociales, y con todo esto se han venido transformando las familias y comunidades.

La transformación ha tenido una salida material, con el mejoramiento de algunas infraestructuras, pero también espiritual. Eso significa, por ejemplo, que se trabaja para que las personas se motiven con asistir a ferias por la salud; para que las escuelas desempeñen su papel como promotoras; para que se gesten proyectos relacionados con la actividad física; para que los instructores de arte desarrollen talleres dirigidos a los diferentes grupos de la localidad, entre otros aspectos que apuntan directamente al bienestar individual y colectivo.

Actualmente, las autoridades de Sancti Spíritus trabajan por alcanzar nuevas metas e incorporar cada vez más actores a las labores relacionadas con el Movimiento de MCCS. Desean compartir su experiencia y apoyar a la provincia para que sus ocho municipios sean declarados saludables.

Refiriéndose a lo logrado hasta el momento, Mínguez Amézaga reconoce que no hubiese sido posible sin el apoyo de la OPS/OMS y la Unidad de Promoción de Salud y Prevención de Enfermedades (PROSALUD), desde donde ha llegado información técnica y recomendaciones muy útiles. Apunta que ese acompañamiento seguirá siendo vital, porque, aunque se ha avanzado, falta mucho por hacer y aprender.

 

Por 30 años más, libres de polio salvaje en las Américas. Por 30 años más de compromiso y dedicación

Cada 24 de octubre, el Día Mundial contra la Polio destaca los esfuerzos mundiales para eliminar la poliomielitis y la importancia de la vacunación para proteger a los niños de esta enfermedad. Representa también una oportunidad para visibilizar la importancia de todas las madres, padres, cuidadores, personal de salud y voluntarios, quienes tienen un rol fundamental para que las vacunas contra la polio lleguen a los niños y sus comunidades.

El último caso de poliovirus salvaje se detectó en septiembre de 1991 en Perú. Hace 30 años, en agosto de 1994, la Región de las Américas fue certificada como libre de polio salvaje. Desde entonces, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha invitado a los países a sostener altas las coberturas de vacunación y fortalecer la vigilancia para mantener a las comunidades seguras ante el riesgo de un posible evento o brote.

«Lograr un hito como este no es sencillo. Implica mucho trabajo, compromiso y tenacidad de miles de trabajadores de la salud, investigadores, socios y de todas las personas responsables que vacunan a sus niños y niñas», destacó el Director de la OPS, Jarbas Barbosa.

Sin embargo, el doctor Barbosa advirtió sobre la persistencia del poliovirus en otras partes del mundo. «Hasta que no erradiquemos el virus de la polio a nivel global, debemos mantener altas las coberturas de vacunación y una vigilancia adecuada para detectar cualquier importación del poliovirus salvaje», enfatizó.

La polio es una enfermedad altamente contagiosa que afecta el sistema nervioso central, provocando parálisis fláccida aguda. Aunque la mayoría de las infecciones no presentan síntomas, en 1 de cada 200 casos, el virus puede causar parálisis permanente en piernas o brazos.

A nivel mundial, los casos de polio han disminuido en más de un 99 % desde 1988, cuando se estimaban 350.000 casos en más de 125 países endémicos, a solo dos países: Pakistán y Afganistán. No obstante, el poliovirus no respeta fronteras y puede encontrar grupos de niños no vacunados o insuficientemente inmunizados, lo que podría dar lugar a brotes.

El doctor Barbosa subrayó el impacto de los programas de inmunización en el control y eliminación de enfermedades prevenibles por vacunación y destacó el apoyo continuo de gobiernos y socios, como Rotary Internacional y el Centro de Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC), en el funcionamiento de estos programas.

A pesar de los avances, el Director de la OPS mencionó que la desinformación y la desconfianza, junto con los efectos de la pandemia de COVID-19, «continúan afectando la cobertura de vacunación en algunas áreas y poblaciones» de la región.

En 2023, el 87 % de los niños y niñas de las Américas habían recibido la tercera dosis de la vacuna contra la polio necesaria para la inmunización completa, una recuperación respecto del 83 % de 2022, pero aun inferior a la tasa de cobertura recomendada. Para prevenir la reintroducción del virus, «es esencial seguir trabajando para lograr una cobertura sostenida superior al 95 % de manera uniforme en cada país», remarcó el doctor Barbosa.

A medida que el mundo avanza hacia la erradicación total de la poliomielitis salvaje, los esfuerzos también se centran cada vez más en mitigar el riesgo de casos derivados de la vacuna. En raras ocasiones, en poblaciones insuficientemente inmunizadas, el virus vivo atenuado originalmente contenido en la vacuna oral contra la polio puede mutar y convertirse en un poliovirus circulante derivado de la vacuna.

Este virus, al replicarse en el tracto gastrointestinal, puede propagarse a través de las heces y las aguas residuales, circulando en el medio ambiente y exponiendo a personas no vacunadas, quienes son susceptibles a contraer la polio.

El Director de la OPS hizo un llamado a todos los líderes comunitarios, trabajadores de la salud y educadores, entre otros, para que se unan en el esfuerzo por erradicar la polio y otras enfermedades prevenibles. «Unámonos hoy para celebrar 30 años más libres de polio salvaje en las Américas y reafirmar nuestro compromiso con un mundo libre de polio», concluyó.

La eliminación de la poliomielitis en Cuba

La poliomielitis fue introducida en Cuba a finales del siglo XIX por norteamericanos residentes en Isla de Pinos. Las primeras epidemias ocurrieron en 1906 y 1909, aumentaron en intensidad entre 1930-1958. En 1909 se reportaron tres casos de parálisis, producto de la poliomielitis, de los cuales dos eran de La Habana y uno de Calabazar. Ese mismo año se notificó la primera epidemia en la otrora provincia de Las Villas, que afectó principalmente a la ciudad de Santa Clara y algunos municipios con una incidencia de doscientos casos, 8 % de mortalidad y 140 casos distribuidos en diez municipios. En el informe de la época constaba también que afectaba fundamentalmente a la población infantil menor de 4 años.

Esta fue la primera epidemia que ocurrió en una población tropical, ya que las anteriores habían ocurrido en regiones no tropicales, como Europa y los EE.UU.

En los años anteriores a la Revolución (1959) no existió en Cuba una política sanitaria que tuviera en cuenta medidas de profilaxis contra la poliomielitis, ni control alguno sobre la enfermedad. Esta tenía un gran impacto social, además de ser un problema epidemiológico entre la población infantil cubana. Eran muy dramáticas las secuelas paralíticas y de deformidades neurolocomotoras que producía, además de su elevada mortalidad.

Aunque existía un trabajo sanitario dirigido por el Departamento Nacional de Sanidad y un médico sanitarista en los principales municipios de la nación, su trabajo era más localizado hacia las epidemias puntuales que se presentaban que a la profilaxis de las enfermedades.

Después de 1959, una de las transformaciones fundamentales en el aspecto sanitario, introducidas por la Revolución, fue el cambio de orientación, de todo el sistema, hacia la prevención de las enfermedades y la promoción de la salud, lo que conllevó el diseño de una nueva estrategia sanitaria a nivel nacional y la transición de las mentalidades de los profesionales de la salud, acompañada de un cambio cualitativo del enfoque de los estudios de medicina en la única universidad en que ésta se enseñaba en esos momentos: la Escuela de Medicina de la Universidad de La Habana.

Con la nueva estrategia de trabajo adoptada por la salud pública cubana y la situación existente en relación a la poliomielitis y la sensibilidad social que sus afectaciones provocaban, sumado a la posibilidad que brindaba la existencia de una vacuna eficaz, segura y fácil de aplicar motivó que las autoridades sanitarias del país tomaran la decisión de controlar la enfermedad mediante una campaña de vacunación.

En la segunda mitad del año 1961, la Dirección Nacional de Epidemiología contó con la asesoría científico técnica del doctor Karel Sacek, jefe de Epidemiología y Microbiología de Checoslovaquia y miembro del comité de expertos en virología de la OMS, quién realizó estudios epidemiológicos sobre el comportamiento de la poliomielitis en Cuba, la época del año en que se presentaba con mayor frecuencia y los grupos de edades más vulnerables.

Los resultados arrojaron que la incidencia de casos era mayor en los meses de verano, entre junio y agosto, y atacaba, fundamentalmente, a niños menores de 4 años, aunque estaban en riesgo todos los menores de 15. De acuerdo a estos resultados, se decidió vacunar en los meses previos al inicio del verano y en las edades comprendidas desde un mes del nacimiento hasta los 15 años.

La incidencia de la enfermedad se redujo a cero desde el año 1963 (solo se reportó un caso aislado en los años 1963, 1964, 1970, 1971 y 1972) y no hubo más mortalidad por la misma desde 1962. Este resultado fue un orgullo para el Sistema Nacional de Salud y sus profesionales, además de un modelo para los países del área y los organismos internacionales pusieron de ejemplo el desarrollo de la campaña cubana y su impacto.

Los resultados de la campaña inicial de vacunación antipoliomielítica y su posterior desarrollo anual se reflejaron en el informe que el Ministerio de Salud Pública sometió a la OMS/OPS para solicitar la certificación de enfermedad eliminada del país, hecho este que se declaró oficialmente desde el 7 de noviembre de 1994, por dichos organismos internacionales.

Chaple EB. Una batalla ganada: la eliminación de la poliomielitis en Cuba. Hist cienc saude-Manguinhos [Internet]. 2015Jul;22(3):961–83.

Precisamente el 22 de abril de este año, se realizó en nuestro país la 63 Campaña Nacional de Vacunación Antipoliomielítica Oral Bivalente, que se extiendió hasta el viernes 26 de abril.

El proceso coincidió con la 22 Semana de Vacunación de las Américas y la 13a Semana Mundial de Inmunización, bajo el lema “Las vacunas para una vida plena”, y con la máxima prioridad de los profesionales sanitarios en la Isla caribeña.

Esta nueva etapa del plan de inmunización, un proceso ya conocido por los padres cubanos, se realizó en esta ocasión con dos dosis de vacuna antipoliomielítica oral bivalente en dos etapas, a todos los niños que el día 22 de abril tuviesen más de un mes de nacido y no hubiesen cumplido los tres años, con una semana de recuperación del 29 de abril al 3 de mayo.

En el mes de junio, entre el 17 y el 21 de junio específicamente, se realizó la segunda etapa de la Campaña, en la cual se administró la segunda dosis a quienes recibieron la primera, y se suministró además, una dosis reactiva a los pequeños de 9 años de edad, con recuperación entre el 24 y el 28 de junio.

La Campaña de vacunación antipoliomielítica, impulsada como una conquista revolucionaria desde 1962, se desarrolla cada año para proteger a la población menor de edad, siendo Cuba el primer estado de América Latina en ser declarado territorio libre de esta enfermedad infecto-contagiosa que afecta el sistema nervioso central.

  • Categorías de anuncio

    open all | close all
  • Categorías de aviso

  • Categorías de editoriales

  • Categorías de entrevista

  • Categorías de informes y sello

    open all | close all
  • Categorías sello – entidades

    open all | close all
  • Categorías de Noticia

    open all | close all
  • Secciones de noticias

    open all | close all
  • Archivo Anuncios

  • Archivo Avisos

    • Archivo Editoriales

      • Archivo Entrevistas

        • Archivo Informe y sello

        • Archivo Nota Oficial

          • Archivo Noticias

          • Archivo Obituarios

            • Actualidad

            • Salud es el Tema