
El Día Internacional de la Mujer se celebra hoy en muchos países del mundo y tiene sus orígenes en las manifestaciones de las mujeres que, especialmente en Europa, reclamaban a comienzos del siglo XX el derecho al voto, mejores condiciones de trabajo y la igualdad de oportunidades en la sociedad. Pero realmente la lucha de las mujeres por el reconocimiento de sus derechos y a ser respetada es mucho más antigua.
Cuando las mujeres de todos los continentes, a menudo separadas por fronteras nacionales y diferencias étnicas, lingüísticas, culturales, económicas y políticas, se unen en este día, pueden contemplar una tradición de no menos de noventa años de lucha en pro de la igualdad, la justicia, la paz y el desarrollo.
Esta celebración se refiere a las mujeres corrientes como artífices de la historia y hunde sus raíces en la lucha plurisecular de la mujer por participar en la sociedad en pie de igualdad con el hombre.
Este año 2025 se celebra bajo el lema: “Para TODAS las mujeres y niñas: Derechos. Igualdad. Empoderamiento”.
De esta manera se persigue ampliar la igualdad de derechos, el poder y las oportunidades para todas las féminas, con un futuro en el que no se deje a nadie atrás. El empoderamiento de la próxima generación es el núcleo de esta idea, ya que la juventud, en especial las mujeres jóvenes y las niñas adolescentes, serán las protagonista de cambios duraderos en el futuro.
Además, este año marca el 30º aniversario de la Declaración de Beijing, un documento clave en el avance de la igualdad de género que ha conseguido mucho desde su adopción en campos como la protección jurídica, el acceso a servicios, la participación de las mujeres y los cambios en normas sociales, ideas y esterotipos enquistados en el pasado.
En Cuba, la huella de la mujer es tan profunda como su historia misma. Nuestro proceso revolucionario se propuso, además, hacerla protagonista. Y así va ella, al frente, consciente de que aún hay mucho que hacer en materia de igualdad, de justicia, y contra la violencia.
Nuestra felicitación y agradecimiento especial, a las mujeres del sector de la salud, que desde cada rincón de las instituciones y los servicios, ponen su empeño en ganarle la batalla a las enfermedades.